Manejar un coche de tracción delantera y uno con la tracción en las cuatro ruedas pueden ser experiencias muy diferentes. La tracción en todas las ruedas le entrega potencia a las cuatro ruedas la mayor parte del tiempo. La mayor diferencia es cómo dirigir los vehículos. También sentirás la diferencia en cómo reacciona un vehículo con tracción en las cuatro ruedas ante las situaciones para las que fue diseñado.
Curva de control
Los vehículos de tracción delantera tienen una tendencia natural al subviraje cuando tomas curvas a altas velocidades. Esto significa que el vehículo sigue funcionando básicamente a la dirección que señalaste en vez de girar alrededor de la esquina como debería. Los vehículos AWD tienen menos tendencia a subvirar. Te sentirás más en control con un vehículo que tiene tracción total a la hora de tomar curvas y esquinas a velocidades mayores de lo que puedes hacerlo con un FWD.
Todo terreno
Si alguna vez llevaste tu vehículo fuera de calle, sentirás la diferencia entre un AWD y un FWD. En un coche de tracción delantera, si las ruedas delanteras comienzan a patinar, probablemente te quedarás atascado, sin poder va a las ruedas traseras. En un AWD, el sistema del control de tracción sabe dónde necesitas más potencia y cuáles ruedas tienen mejor tracción. La potencia máxima se entrega esas ruedas para ayudarte a transitar por un terreno que es probable que dejes un vehículo FWD atascado.
Aceleración
A menudo, cuando intentas acelerar sobre nieve o hielo un coche con tracción delantera, sentirás que las ruedas giran antes de que realmente puedas usarlas para salir de la línea. Esto puede ser un problema en las señales de alto o semáforos con las inclemencias del clima. En un vehículo de tracción total, sentirás que las cuatro ruedas están tratando de agarrarse de algo para ofrecerte una aceleración mejor, sin deslizamiento.
Frenado
Es un mito que los coches de tracción total se desempeñan mejor en la frenada. Los coches FWD y AWD son lo mismo y los autos de tamaño similar, con sistemas de frenado similares incluso se detendrán en la misma distancia, ya sean FWD o AWD. Esto es porque incluso en el vehículo en que se suministre la potencia motriz a las ruedas delanteras, las cuatro ruedas todavía tienen frenos. Responde básicamente de la misma manera que lo hacen en un AWD. En todo caso, la mayoría de los coches de tracción total son más pesados que sus equivalentes de tracción delantera, por lo que el frenado en realidad podría ser peor.
